Hace tiempo que andaba pachucho este gran actor asturiano, considerado de los pocos supervivientes de la época dorada de los spaghetti-western de Almeria.Para colmo no es para menos, en su terreno personal ha perdido a dos pilares de su vida, que son sus hermanos en apenas poco tiempo, sin duda es uno de los peores años de este gran actor, muy reservado en su vida personal pero que es digno que se conozca esto para que todos los que le admiramos le demos nuevos ánimos para el futuro ya que anda decaído.
Como recuerdo traigo aquí su mejor cara, la del dicharachero y jovial vaquero que conquistó al público, en el recuerdo por la dureza genial de sus actuaciones.Esta fue una breve entrevista que mantuve con el hace ya un tiempo, pero en la que aún desvelaba su brillo escénico.
-¿Como va el retiro de uno de los geniales del western?
-Bien vengo de hace unos días de un homenaje del genial Fajardo, que con más de 90 años sigue actuando.
-Interesante saber que los grandes del cine están en activo a esas edades ¿Tiene usted algún proyecto?
- Por supuesto tengo algunos guiones que de vez en cuando estudio, pero dado mi estado ya les he dicho que no estoy para los mismos trotes y que si se adaptan a mí podríamos pensar algo.
-¿Cuentenos alguna cosa de aquel dorado cine de Almeria?
-No sé, por ejemplo que Fonda era un tío simpatico que solía ir con nosotros a tomar algo a Almeria o que Bronson era un tipo bastante serio, no sé si es que se creía estrella y mantenía la distancia o es que no nos entendía nada.
-¿Qué es lo mejor que recuerda de aquellos filmes?
-Ni más ni menos que la envidia que me tenían los actores que hacían de buenos, pues siempre acababa los rodajes antes que ellos y que encima me envidiaban, pues lo que cobraban no les compensaba mucho en comparación a mí.
Sin duda agradezco estos recuerdos y esperamos que se recuperé de esas perdidas que la vida nos castiga de vez en cuando y que su salud mejoré para volver a verle, aunque sea en algún cameo en algún buen proyecto.